La compañía British Condoms está tomando pedidos anticipados para la nueva boquilla en forma de aro que se ajusta a los preservativos con la finalidad de medir y rastrear la actividad sexual. La venta al público estará disponible hacia finales de 2017.

A pesar de los numerosos avances en el campo de la anticoncepción, los preservativos siguen siendo el método de protección más popular para prevenir el embarazo y las enfermedades de transmisión sexual (ETS). En el campo del mercadeo y la competencia, los fabricantes de preservativos experimentan con su densidad, forma, olor, sabor y hasta con asas para una colocación más cómoda. Tampoco han faltado proyectos de preservativos que cambian de color al contacto con una ETS. Sin embargo, hasta ahora no se había probado uno que tenga “propiedades” electrónicas.

Desarrollado por British Condoms, la boquilla, denominada i.Con, es un aro de goma que se ajusta en la base del preservativo. Dentro de este dispositivo se encuentran un nanochip y un sensor, unidos con fibra de carbón. i.Con está diseñado para ser usado múltiples veces (la garantía es de un año) y se recarga por un puerto microUSB. Una carga de batería tiene una duración de hasta 8 horas de uso activo.

 

De acuerdo a la descripción del producto, i.Con puede registrar la siguiente información: duración, frecuencia, temperatura y número de calorías quemadas durante el acto sexual; cantidad de compañeros sexuales; cantidad y variedad de poses sexuales en una semana, mes y año; cantidad y velocidad promedio de la fricción durante el acto sexual; y, por último, la circunferencia del pene en erección. También es posible detectar los patógenos de las ETS más comunes, aunque esta función todavía está en fase de validación y aprobación.

Finalizado el encuentro sexual, la información obtenida por i.Con se transmite vía Bluetooth a una aplicación que permite almacenarla de manera anónima o, si se prefiere, es posible compartirla con los demás usuarios.

De acuerdo al fabricante, i.Con es sutil e imperceptible durante su uso. El costo del dispositivo durante el período de pre-venta es de 59,99 libras esterlinas (cerca de 74 dólares). Inicialmente, el dispositivo se venderá solo en el Reino Unido, pero se espera un lanzamiento en el mercado mundial si es que se presenta la suficiente demanda.

Recientemente, científicos estadounidenses han probado, de manera exitosa, un nuevo gel anticonceptivo en monos machos que bloquea la salida de los ductos seminales. Asimismo, en los Estados Unidos, investigadores crearon un “exoesqueleto” que retiene la forma del pene con el objetivo de ayudar a los hombres que padecen de disfunción eréctil.