La persona con Distimia o trastorno distímico generalmente pierde el interés en las actividades que desarrolla en su vida cotidiana, esto repercute en el deseo y su actividad sexual

La Distimia o enfermedad del humor, es un trastorno depresivo o emocional que se ha vuelto común en los últimos años; este padecimiento es similar a la depresión, sin embargo se pueden diferenciar porque la distimia presenta síntomas más leves pero con más frecuencia. Una persona que padece de este trastorno generalmente es invadida por  tristeza y sufrimiento emocional persistente durante todo el día, afectando su calidad de vida.

Entre los principales síntomas se encuentran:

  • Melancolía

  • Falta de interés en las actividades cotidianas

  • Baja autoestima

  • Falta de energía

  • Fatiga

  • Sensación de desespero

  • Dificultad para tomar decisiones o concentrarse

  • Aislamiento social

  • Llanto

  • Insomnio

  • Disminución del rendimiento sexual

  • Falta de deseo sexual y de fantasías sexuales o conocida como deseo sexual hipoactivo

  • Pérdida de confianza o sentimientos de inferioridad

La sexualidad también se ve afectada por este trastorno, en muchos casos, la libido de la persona que lo padece baja de tal manera que casi ya no existe. Generalmente cuando la persona comienza a experimentar cambios en su apetito sexual y se investiga la causa, se concluye que la misma se debe a un cuadro de distimia.

Es común que la persona que padece de distimia experimente la desaparición de cualquier tipo de deseo sexual, y por ende la capacidad para disfrutar de las fantasías sexuales. En algunos casos, este estado puede ocasionar trastornos sexuales como la disfunción eréctil en el hombre y ausencia de orgasmos (anorgasmia) en la mujer.

Las causas de este padecimiento se relacionan con factores genéticos, sin embargo existen otras circunstancias que pueden estar involucradas, como las psicosociales, falta de estímulos positivos en la infancia, el aislamiento social, vivencias traumáticas o situaciones de estrés prolongadas.

Se debe tomar en cuenta que los síntomas de la distimia son similares a los de otros trastornos psiquiátricos, por esta razón se recomienda consultar con un especialista para realizar un diagnóstico adecuado.

La distimia se considera un trastorno leve si se compara con otros cuadros clínicos, sin embargo, si no se le da la importancia que amerita y no se trata a tiempo, puede ocasionar consecuencias significativas en la vida del paciente, afectando gravemente su calidad de vida.

Como en todos los casos médicos existe tratamiento que ayudan a prevenir o revertir los daños ocasionados por este trastorno. El tratamiento involucra una combinación de medicamentos antidepresivos con psicoterapia. Sin embargo en las personas con disfunción sexual, deben ser cuidadosas en la elección del medicamento, debido a que los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (IRSS), pueden tener efectos secundarios en este tipo de personas.

El trastorno generalmente perdura significativamente en la persona, lo que aumenta los riesgos de padecer trastorno depresivo mayor, por lo que es necesario identificarla oportunamente y tratarla adecuadamente.