¿Te ha paso que el temor a “fracasar” te pone muy tenso y te imposibilita la erección?
La anticipación mental de un posible fracaso puede ser una de las causas de los problemas de erección. Si te ha ocurrido eso en alguna ocasión, o te sucede con frecuencia, y te atormenta la idea de que vuelva a pasar, te puede generar ansiedad frente al acto sexual y puedes acabar siendo una persona evasiva, que elude la práctica del sexo.
¿Cómo enfrenta esta situación y salir de ella?
Si has tenido episodios como este, puedes estar tranquilo. Esta situación tiene solución. Lo importante es vencer ese miedo que tienes a tu “rendimiento”, así como un poco de entrenamiento en la respuesta sexual, y sobre todo, una comunicación correcta con tu pareja.
Evita aislarte u ocultar el problema. La sexualidad siempre es cosa de dos y los problemas de erección se afrontan mejor en pareja. Evadir la situación, generará frustración en ti y en tu pareja y te distanciará de ella.
Utilizar la imaginación y los juguetes eróticos, lencería y diferentes accesorios puede producir un importante efecto de estimulación y por ende la erección.
La ayuda psicológica, como es el caso de las técnicas de relajación, se ha demostrado como muy exitosa para reducir la ansiedad y el estrés, y solucionar esos problemas de erección que tanto te preocupan.
Algunos Consejos
- Si consumes regularmente alcohol o tabaco, o cualquier otro elemento adictivo, comienza por dejarlo poco a poco. Estos hábitos fomentan la dificultad para el acto sexual.
- Si abusas de las bebidas con cafeína, o tomas muchos hidratos de carbono, son dos aportes para tu organismo que no te ayudan a la hora de tener una erección.
- Para una saludable vida sexual, tienes que descansar las horas precisas, las adecuadas para la actividad que desarrollas y para tu edad.
- Al momento de tener una relación sexual, habla con tu pareja y haz un pacto con ella para que la finalidad de las caricias y el contacto físico sea simplemente eso, disfrutar de ese contacto, y no entendido como un camino para llegar sí o sí a la penetración y al orgasmo. En esa tranquilidad mental, la erección llegará.
