Con la llegada de los años aparecen cambios fisiológicos que pueden amenazar nuestro desempeño sexual. Muchas veces el sexo se ve condicionado por estos cambios, que junto a algunos prejuicios y falsas creencias limitan el disfrute del mismo en personas mayores. Es por ello que es importarte educarse sobre este tema y no dejar que los tabúes sean un obstáculo para continuar disfrutando de la sexualidad.
El sexo en la tercera edad se ha visto envuelto en falsos mitos, como por ejemplo la pérdida del interés o el deseo sexual a medida que transcurren los años, lo cual es totalmente falso, pues la atracción por el sexo no desaparece, y cuando ocurre generalmente es provocado por algunos factores psicológicos que limitan el desempeño sexual.
Es normal que nuestra sexualidad varíe en cierto modo por el proceso natural del envejecimiento. Con la llegada de la menopausia y la andropausia ocurren cambios hormonales, los cuales podrían servir de excusa para la alteración en la frecuencia de las relaciones íntimas en los adultos. Sin embargo, esto no es un impedimento para seguir disfrutando del sexo, lo importante es adaptarse a estos cambios y aprender a disfrutar el sexo de otra manera.
Cambios Fisiológicos
Es cierto que tanto el hombre como la mujer experimentan algunas variaciones a partir de cierta edad que pueden afectar la actividad sexual, como son:
En el hombre:
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La eyaculación es más lenta y menos intensa
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Reducción de la producción de espermatozoides y el líquido preseminal
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Los orgasmos duran menos
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El tiempo entre un coito y otro es más largo
En las mujeres:
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Disminuye la lubricación vaginal
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Orgasmos con menor intensidad
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Dispauremia (dolor durante el coito)
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Pérdida de elasticidad de la vagina
Existen otros factores asociados a la disminución de la actividad sexual como lo son algunas enfermedades, por ejemplo la diabetes, la hipertensión, enfermedades cardiovasculares, neurológicas y urológicas, entre otras. También existen ciertos medicamentos administrados para algunos padecimientos que afectan el deseo sexual.
Pese a estas eventualidades, la tercera edad no debe ser impedimento para dejar de llevar una vida sexual activa. Quizás no se puede mantener la misma frecuencia o intensidad de la juventud, pero si se puede trasformar y adaptarse a estos cambios, durante una edad avanzada quizás se deba aumentar los afectos de cariño, mimos, cuidados y compañía, esto forma parte de todo el proceso en una relación de pareja y ayudará a mantener vivo el amor.
Es importante que las parejas de la tercera edad no se dejen llevar por los tabúes que impiden mantener su sexualidad viva. El amor y el sexo pueden seguir vigentes a través de los años. No hay por qué esconder los deseos sexuales simplemente por la llegada del envejecimiento, las relaciones con otras personas, el deseo sexual y el amor forman parte del ser humano y nos acompañarán durante toda la vida.
¿Cómo mejorar la sexualidad durante la tercera edad?
Mientras se acepten a los cambios que traen los años y se vean de forma positiva, se puede mantener una sexualidad activa durante el envejeciendo, por ejemplo: el tiempo utilizado para la estimulación es propicio para las caricias, los besos, los abrazos y para generar esa conexión íntima tan importante que no debe perderse.
La práctica del sexo trae consigo algunos beneficios para la salud, es por ello que si se practica durante una edad avanzada puede mejorar algunas afecciones como por ejemplo la regularidad del sueño, eliminar dolores, evitar el estrés y elevar la autoestima.
Para disfrutar de una sexualidad placentera durante la tercera edad también es importante tener un envejecimiento sano, por eso te aconsejamos tener una buena alimentación, hacer ejercicio, mantener una buena comunicación con tu pareja, para entender sus necesidades, y visitar al sexólogo, quien te brindará herramientas importantes para asumir este estado natural en el ser humano y gozar de una sexualidad plena en la tercera edad, así como también te recomendará algunos medicamentos que pueden contrarrestar los cabios fisiológicos
La clave para disfrutar del sexo durante una edad avanzada es asumir y aceptar los cambios que los años acarrean, entendiendo que la sexualidad en esta etapa no se mide cuantitativamente y evitando los prejuicios o patrones culturales que coartan el derecho de tener una vida sexual satisfactoria. De esta forma podrás disfrutar del sexo y de otros factores que componen el término de sexualidad como la afinidad, la complicidad, el amor y la comunicación.